miércoles, 28 de mayo de 2008

ya veremos...

Más de 100 países acuerdan prohibir sus bombas de racimo.
Dublín acoge la firma de un tratado internacional en el que no participan EE UU, China o India.- Sus términos deberán ser ratificados en diciembre en Noruega.

El tratado internacional que prohíbe el uso, fabricación y almacenamiento de las bombas de racimo ha sido aprobado por 109 países, entre ellos España, hoy en Dublín, según ha anunciado el Gobierno irlandés.

martes, 27 de mayo de 2008


Culicoides sonorensis, un «mosquito» de la familia Ceratopogonidae.

Chironomus plumosus, un «mosquito» de la familia Chironomidae.

Uno de estos ha estado toda la noche incordiando en la oreja derecha.

No he pegado ojo.

Escucho el concierto para piano y orquesta nº 3 en do menor de Beethoven.

Desayuno y ducha.

Plancho lo justo.

Preparo el atril, instrumento y partituras para ir a tocar a Pontevedra.

Cuento con estar de vuelta a la hora de comer, tengo clase a las 4:00.

Empiezo a estar cansada, dos semanas más y llegan las esperadas vacaciones.

Recomiendo que visiteis la página veleirovisual.com, me ha encantado, sencillamente es genial.

Sale el sol, algo me dice que hoy no llueve.

sábado, 24 de mayo de 2008



¿Tendremos qué lijarnos los bolsillos?

miércoles, 21 de mayo de 2008

patético

'L'Orfeo' de M0nteverdi en cine, sí, pero sin imagen ni sonido.

Un fallo impide la proyección de la ópera en 15 salas.


Para algunos fue un fiasco. Para otros, un auténtico placer. Ochenta cines de España y Europa habían sido elegidos para que miles de espectadores pudiesen contemplar en directo en la noche del lunes la retransmisión de L'Orfeo de Monteverdi desde el Teatro Real, de Madrid. Sin embargo, un fallo técnico impidió que el público que había comprado las entradas en los cines propiedad de la empresa Cinesa pudiese escuchar la obra. En total, este incidente afectó a 1.500 personas, repartidas en 15 salas de toda España.

(véase Orfeo)

martes, 20 de mayo de 2008

El conflicto en Oriente Medio está devorando el alma judía
No hay una solución militar para la región sino una pragmática y a la vez sensible: la existencia del Estado israelí y el palestino. Es la única vía para recuperar las mejores ideas que lograron forjar a Israel hace sesenta años.

Por: Daniel Barenboim Fuente: PIANISTA Y DIRECTOR DE ORQUESTA

En las paredes de mi vestuario de la Staatsoper de Berlín hay fotografías que me recuerdan lo que veo cuando miro por la ventana de mi casa en Jerusalén. Están un poco descoloridas y en algunas partes el papel se está deshaciendo, pero es fácil reconocer las vistas: la Ciudad Vieja, la Mezquita de la Roca con su refulgente cúpula, los muros, las puertas. A veces me siento aquí antes de actuar, observo esas fotografías y pienso en Jerusalén, en Israel, en mi patria. La situación en Oriente Medio me resulta demasiado cercana, es demasiado personal como para que pueda caer en el sentimentalismo.Desde 1952 poseo pasaporte israelí. Desde que tengo 15 años viajo por el mundo en mi calidad de músico. He residido en Londres y en París, y durante años he vivido entre Chicago y Berlín. Antes de tener pasaporte israelí, lo tenía argentino; y después adquirí el español. Además, en 2007 me convertí en el único israelí del mundo que también puede enseñar un pasaporte palestino en los puestos fronterizos israelíes. Soy, por así decirlo, una prueba patente de que sólo una solución pragmática basada en la existencia de dos Estados (o, mejor aún, aunque suene absurdo, una federación de tres Estados: Israel, Palestina y Jordania) puede llevar la paz a la región.¿Cómo respondo a quienes me dicen que soy ingenuo, sólo un artista? Les digo que, aunque de niño estreché la mano de Ben Gurion y de Simon Peres, no soy un político: lo que siempre me ha interesado es la humanidad, no la política. En ese sentido, me siento capaz de analizar la situación y, como artista, especialmente capacitado para hacerlo.Tanto mis abuelos paternos como maternos eran judíos rusos que huyeron a Buenos Aires durante los pogromos de 1904. Cuando llegaron al puerto de Buenos Aires, a mis abuelos maternos (él con 16 años, ella con 14), después de una espantosa travesía, les anunciaron que sólo las familias podían desembarcar, porque el cupo de solteros ya estaba cubierto. Los dos estaban solos y mi abuelo agarró a mi abuela y le dijo: '¡Casémonos!'. Y así lo hicieron. Una vez en tierra, cada uno se fue por su lado.
Después de dos o tres años se reencontraron por casualidad, se enamoraron y pasaron el resto de su vida juntos.Esta abuela era una ferviente sionista. Ya en 1929 se fue a Palestina durante seis meses con sus tres hijas -entre ellas mi madre, entonces de 17 años- para comprobar si se podía vivir allí. Por su parte, la familia de mi padre estaba totalmente asimilada: para ellos, la Tierra Santa no tenía importancia, por lo menos hasta que descubrieron mi talento musical. De repente, para mis padres cobró importancia que yo, en mi calidad de futuro artista, debía crecer dentro de una mayoría y no de una minoría ubicada en algún punto de la diáspora judía. La familia Barenboim decidió emigrar a Israel.En 1952 llegamos a Israel. Era invierno, el año escolar ya había empezado, y yo tenía que aprender otro alfabeto y otro idioma. No fue nada fácil, pero, como era un chico poco complicado y extrovertido, no tardé en adaptarme. ¡Imagínense que fue precisamente en las calles de Tel Aviv donde aprendí a jugar al fútbol! Si hemos de atenernos a los hechos, no he pasado períodos muy prolongados en Israel. Estuve allí sólo entre 1952 y 1954, y desde 1956, hasta comienzos de los sesenta. Cuando no acudía al colegio, estaba de gira dando conciertos en Zurich, Amsterdam o Bournemouth.
En los años 50, Israel era el Estado más social e idealista que se pudiera imaginar. Fue una suerte que el país y nosotros fuéramos jóvenes al mismo tiempo. El Estado evolucionaba literalmente ante nuestros propios ojos y alimentaba nuestro idealismo, nuestro compromiso diario, nuestro trabajo. La izquierda israelí, el Partido Laborista, estuvo en el poder hasta 1977, algo que se olvida con frecuencia. Fueron 29 años. ¿Y por qué? Después de la Guerra de Independencia de 1948, los tradicionalistas no tenían nada que hacer, puesto que la contienda ya estaba ganada. Los judíos religiosos seguían esperando al Mesías. De manera que lo que quedaba eran los socialistas. Los vientos no cambiaron hasta después de la Guerra de los Seis Días de 1967. La idea de un Israel de base perdió pie. De repente, había mano de obra más barata procedente de los territorios palestinos y, no mucho después, aparecieron los primeros millonarios israelíes. El sistema socialista perdió su equilibrio; la concepción del Estado se tambaleó.Después de 1967, Israel volvió mucho más la vista hacia Estados Unidos, no necesariamente para su propio beneficio. Los tradicionalistas decían: 'No abandonaremos los territorios recién ocupados'. Los judíos religiosos, que no eran 'territorios ocupados sino liberados, son territorios bíblicos'. Y de esta forma se selló el fin del socialismo en Israel. Desde entonces, la política internacional ha instrumentalizado el conflicto de Oriente Medio.Llevamos décadas leyendo titulares sobre explosiones de violencia. Las guerras y las acciones terroristas se suceden. Con la guerra de Irak y el conflicto con Irán, apenas se leen noticias sobre el asunto, lo que es todavía peor.
Muchos israelíes sueñan con despertarse un día para ver que los palestinos se han ido, y éstos con lo contrario. Ni uno ni otro bando pueden diferenciar ya entre el sueño y la realidad, y, psicológicamente, éste es el quid del problema.Desde la década de 1960 no me siento cómodo en Israel. Por supuesto, es mi patria; mis padres vivieron allí y ambos están enterrados en Jerusalén. Siempre que ha habido guerra en Israel, he tocado en el país: en 1956, 1967 y 1973. La música ha sido mi lengua, mi arma. Sin embargo, después del Septiembre Negro de 1970, Golda Meir dijo: '¿Por qué se habla de los palestinos? ¡Nosotros somos el pueblo palestino!' En ese momento caí en la cuenta de que esa posición era moralmente inaceptable. Sí, los judíos tenían derecho a un Estado propio y también a este Estado concreto. El Holocausto y la culpabilidad de los europeos después de 1945 incidieron aún más en esa reivindicació n. Sin embargo, se olvida con demasiada facilidad que existía un sionismo moderado y que desde el principio personas como Martin Buber declararon que el derecho a tener un Estado judío debía hacerse aceptable para la población local, para los no judíos.En la actualidad, muchos israelíes no tienen ni idea de lo que sienten los palestinos, de cómo es la vida en una ciudad como Nablus, una prisión con 180.000 reclusos en la que no hay ni restaurantes, ni cafés ni cines. ¿Qué ha ocurrido con la famosa inteligencia judía? Ni siquiera estoy hablando de justicia o de amor. ¿Por qué se continúa alimentando el odio en la franja de Gaza? Nunca podrá haber una solución militar, porque dos pueblos luchan por una sola tierra. Por fuerte que sea Israel, siempre sufrirá inseguridad y miedo. El conflicto se devora a sí mismo y al alma judía.Quisimos hacernos con tierras que nunca pertenecieron a los judíos y construir en ellas asentamientos. En ese hecho, los palestinos ven, y con razón, una provocación imperialista. Su resistencia, su no, es absolutamente comprensible, pero no los medios que utilizan para llevarla a cabo, ni tampoco la violencia o la inhumanidad indiscriminada.
A medio plazo, soy pesimista respecto a Oriente Medio, pero a largo plazo soy optimista. O encontramos una forma de vivir con el otro o nos matamos. ¿Qué es lo que me da esperanza? Hacer música. Porque, ante una sinfonía de Beethoven, el 'Don Giovanni' de Mozart o 'Tristán e Isolda' de Wagner, todos los seres humanos son iguales.

The Guardian, 2008

lunes, 19 de mayo de 2008

maternidad

Mi última lectura "La revolución del nacimiento" de Isabel Fernández del Castillo es una ocasión genial para entender como y porqué narices la mayoría de mis amigas se han embarcado en esta bella y dificil misión de ser mamás. Recomendado por M, de Madrid, que ya está como un tonelito, pero peligrosamente guapa y atractiva. Este viaje la ví un poco más delgada de cara, pero con un barrigón tremendo.

Es un libro no demasiado técnico y sí bastante exhaustivo en cuánto al sistema de atención al parto. Las personas tienen derecho a decidir cómo y donde parir. Hay quien se decide por la opción hospitalaria, o por alumbrar en casa o en un acuario o en el campo...todas muy respetables. Deberíamos leer las recomendaciones de la OMS en esta materia para no caer en falsos mitos o errores insalvables. Bien es cierto que muchas de las intervenciones rutinarias en el paritorio han demostrado ser pejudiciales. Yo, ni pincho ni corto, cada quien que haga lo mejor "per se", sus creencias, intereses, o prejuicios...pero estoy de acuerdo en algo, que es: despojarse de la ingenuidad y ejercer el derecho de parto, de volver a retomar un poder que es propio, no solo como cuestión femenina, sino también de pareja. Animensé y hagan, hagan muchos niños, que las pensiones peligran y mi trabajo también.

martes, 13 de mayo de 2008

Acabo de darme cuenta de que hoy ha sido martes 13. Cualquier otro año hubiera puesto el grito en el cielo, de coña claro, pero ahora me la repampinfla. Tengo cosas mas importantes en que pensar y hacer.
Llevo un par de días en casa de A+D. El motivo, no hay luz en mi casa y me he instalado como una ocupa. Encantada de la vida. Del lugar de ensayo a su casa y de su casa a los ensayos en cinco valiosos minutos. Se nota mucho la ausencia de tráfico.
Este mes será lo peorcito del año, en vez de pensar en la recta final (el 4 terminan las clases), noooo, me comprometo a dar diez conciertos. Genial.
Xa naceu a peque de Helen e Antoine, chámase Valentina. Benvida á terra e que sexas forte e felíz ( o primeiro e imprescidibel miña raiña, o mundo volveuse tolo...)
Estoy un poquitín griposa y quizás tenga unas décimas de fiebre, porque siento frío hasta en las uñas.
Echo de menos a alguien. Su calor, sus mimos, su sentido del humor, su presencia física mientras trabajo, toco, escribo o cocino. Lo siento cerca aunque en realidad esté muy lejos. Lejísimos.
El fin de semana vinieron a comer M+B. Disfruto mucho de su compañía, son lo más parecido a la familia. Después de comer B se quedó dormida en el sofá y la situación me resultaba entrañable.
El martes que viene vendrá mi hermana P a pasar unos días. Necesita evadirse de su enfermedad y ubicarse en su nueva situación vital. La necesito más que ella a mí. Si la tengo cerca me preocupo menos, aunque esté mejorando día a día, paso a paso. Lentamente.
Debería ir pensando en el verano. No pienso hacer nada más que disfrutar de aquellos que me quieran aguantar. Aquí o allá.

sábado, 10 de mayo de 2008

Gutman


Natalia Gutman

The renowned Russian cellist, whose new disc of Poulenc, Myaskovsky and Britten is out this month, gave a rare interview to fellow cellist ALEXANDER BOYARSKY. He began by asking about her influences.
Photo: Accidents happen: Gutman changing a string in performance
"...It’s difficult to say who has influenced me the most – at different stages of one’s life one tends to look to different idols for different types of inspiration. First there’s my mother, a talented pianist who after the Second World War was permitted to borrow an upright piano. I used to admire all the music she played, and when I hear it now I feel nostalgic. Then there’s my stepfather, the cellist Roman Sapozhnikov. He bought me a small cello and started teaching me for fun. Of course, the fun was later to turn into something more serious, because I decided to play the instrument for the rest of my life. Finally, there are my cello teachers, all of whom gave me something.I practised without any sense of direction until I was 14 years old, at which point I started to search for musical guidance. Isaac Stern was the first to create a big impression, during his visit to Moscow. I managed to get into his concerts without tickets, and I can remember to this day the atmosphere in that hall, his inimitable sound, the beauty and freedom of his playing. Six months later I heard the pianist Sviatoslav Richter and fell in love with not only his playing but also his special personality. I never missed any of his Moscow concerts and got to know his repertoire really well.When I was 14 my grandfather, the violinist Anisim Berlin, who had been a student of Leopold Auer and concertmaster of the USSR State Symphony Orchestra for many years, started to teach me twice a week. He taught me for four years – and he was a great teacher. For many years, until I graduated from the Moscow Conservatoire, I also studied with Galina Kozolupova, and I attended Rostropovich’s concerts, which were a real education. I admired Rostropovich and entered his postgraduate class."

jueves, 8 de mayo de 2008

Cogito, ergo sum
















Las grandes ciudades nos ofrecen tantas ofertas como estrellas, muy pocas originales, pero reconozco que la escasez es un privilegio. La semana pasada estuve un par de días en Madrid y disfruté de una suculenta comida en un santuario Hare Krishna, con oficio religioso incluido. Ha sido una de las mejores experiencias de mi vida. Os lo recomiendo.
La primavera es una de mis estaciones favoritas. Supongo que la de muchas personas. Podría decir que por infinidad de motivos pero todos se resumen a dos: el clima y la luz.



Este arbol me cobijó durante horas mientras reflexionaba sobre algunos apuntes de mi vida. No es posible resetear, demasiada carga en el disco duro.


Hacía mucho tiempo que no paseaba por el Retiro. Pude recorrer varios Kms dando vueltas y divagando de un lado a otro del parque. Lo mejor, los puestos callejeros de libros de segunda mano y el cesped.






Estos pies no me pertenecen, pero no puede resistirme a fotografiarlos mientras el individuo dormía. Menos mal que no despertó.






Tenía un asignatura pendiente con la Fundación de La Caixa en Madrid. Su flamante nuevo edificio, situado en el Paseo del Prado es espectacular, no solo por la ubicación sino por la arquitectura. Me gustó la exposición pero también el ambiente cosmopolita y desenfadado.


En la foto podemos ver un hombre conectado a una bombona de helio. Realidad o ficción?











Las calles estaban empapeladas con carteles como éste. Me llamó la atención el contenido y la imagen de dos chicas y un chico. ¿Por qué no dos chicos y una chica? ¿ Qué pasa? ¿ Las lesbianas son más numerosas o más viciosas? No es una cuestión de estudio ni de discriminación pero podrían haber puesto las dos opciones. La bisexualidad nos atañe a todos en mayor o menor medida.